El 8 de septiembre de 1884, el
Noveno Obispo de Linares, Dr. D. Ignacio Montes de Oca y Obregón, mencionaba en un sermón la existencia de tres altares que ordenó erigir en el entonces Santuario de Nuestra Señora del Roble: uno, a la Virgen de Guadalupe, ubicado hoy en su lugar original, en memoria del segundo Obispo, Fr. Rafael José Verger y Suau, O.F.M., ya que él construyó el Palacio de Nuestra Señora de Guadalupe, hoy Museo Regional del Obispado. el segundo a San Juan Nepomuceno en memoria del Octavo Obispo de Linares, Dr D. Francisco de Paula Verea y González,-que se conserva en la capilla del Santísimo-, y el tercero, dedicado a
San Ignacio de Loyola, en honor al santo de su nombre, -actualmente en la misma capilla del Santísimo.
Esta escultura es una talla en madera de más de 135 años de antigüedad, elaborada en un taller en Munich, Alemania. Y cuyo autor fue Josef Knabl , el cual se dedicaba a la escultura de imágenes católicas y empezó a surtir a muchos alemanes católicos que emigraron a los Estados Unidos. Y en 1863 fue nombrado profesor de Escultura Eclesiástica de la Academia de Bellas Artes de Múnich, en reconocimiento a su labor principal en la Iglesia de Nuestra Señora de Munich.
